Argentina, un país donde casi nada es lo que parece
Argentina, nombre que deriva de Argento-Plata; aunque el color que predomina es el verde de sus campos y sus montañas.
Disponemos de kilómetros de tierra, no obstante construimos robándole espacio al río.
Río de la plata; que en realidad es color marrón, y no hay Plata ni hubo, la Plata era originaria de Perú.
Los puentes de Buenos Aires; casi ninguno es conocido por su nombre real.
En las Plazas, sus monumentos rara vez corresponden a dichas plazas.
El monumento llamado a los Españoles; es un regalo que los Españoles, donaron a nuestro país, o sea monumento de los Españoles que tampoco es su verdadero nombre y es uno de los pocos que no ha sido trasladado, ya que la mayoría deambularon por diferentes lugares; hoy aquí, mañana, quién sabe dónde lo pondrá el político de turno.
La fuente llamada de las Nereidas; uno de los monumentos más bellos que poseemos. Fue llevado y traído de un espacio a otro, infinidad de veces, hasta recalar en la Costanera Sur, y se lo conoce con el nombre de Lola Mora, quien en realidad ha sido la escultora que lo realizó.
El barrio más costoso y codiciado por los poderosos, Puerto Madero; las calles llevan nombres de mujeres, mujeres que lo merecen y que salvo excepciones nadie conoce. Si algunas revivieran de sus tumbas, tendrían interesantes cosas para decirnos al ver su nombre en dicha zona.
Volviendo a la misma zona, está el puente llamado de la mujer, su aspecto induce a pensar en la proa de un barco o el perfíl de un avión, medios que muy pocas mujeres manejan ya que la mayoría solo se traslada en automóvil.
Argentina, nombre que deriva de Argento-Plata; aunque el color que predomina es el verde de sus campos y sus montañas.
Disponemos de kilómetros de tierra, no obstante construimos robándole espacio al río.
Río de la plata; que en realidad es color marrón, y no hay Plata ni hubo, la Plata era originaria de Perú.
Los puentes de Buenos Aires; casi ninguno es conocido por su nombre real.
En las Plazas, sus monumentos rara vez corresponden a dichas plazas.
El monumento llamado a los Españoles; es un regalo que los Españoles, donaron a nuestro país, o sea monumento de los Españoles que tampoco es su verdadero nombre y es uno de los pocos que no ha sido trasladado, ya que la mayoría deambularon por diferentes lugares; hoy aquí, mañana, quién sabe dónde lo pondrá el político de turno.
La fuente llamada de las Nereidas; uno de los monumentos más bellos que poseemos. Fue llevado y traído de un espacio a otro, infinidad de veces, hasta recalar en la Costanera Sur, y se lo conoce con el nombre de Lola Mora, quien en realidad ha sido la escultora que lo realizó.
El barrio más costoso y codiciado por los poderosos, Puerto Madero; las calles llevan nombres de mujeres, mujeres que lo merecen y que salvo excepciones nadie conoce. Si algunas revivieran de sus tumbas, tendrían interesantes cosas para decirnos al ver su nombre en dicha zona.
Volviendo a la misma zona, está el puente llamado de la mujer, su aspecto induce a pensar en la proa de un barco o el perfíl de un avión, medios que muy pocas mujeres manejan ya que la mayoría solo se traslada en automóvil.
Como apreciarán, somos un pueblo muy coherente y de gran imaginación.
Escrito por María del Carmen Castro
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